Gastronomía musical, los géneros que marcan cada festival

 Como en la cocina, cada zona territorial tiene su sabor melódico característico

Mapa de los festivales de música más grandes de España - ElEspañol

Adrián Ruck, Castellón.

Cada año se celebran en España una gran cantidad de festivales de música de alto perfil, los más grandes suelen tener una temática muy definida. En nuestra zona más cercana encontramos el FIB (Festival Internacional de Benicássim), el Arenal Sound, el Medusa Sunbeach y otros más pequeños. Entre estos tres destaca el FIB, ya que es el único cuya temática es bastante variada, trayendo a artistas de rock, pop, rap y trap o incluso reggaeton y música electrónica. Pero los otros dos se mantienen fieles al sabor músical de la Comunitat, la música de fiesta, es decir, principalmente electrónica y reggaeton. 

A diferencia de nuestra zona, en el interior encontramos festivales que tienden más a ocupar sus puestos principales con artistas y grupos de pop y rock como son el Mad Cool en Madrid y el Primavera Sound en Barcelona. Y por último, en el norte de la península encontramos el Resurrection Fest, un festival que protagoniza la música metal, punk y hardcore y que se aleja aún más de la temática que caracteriza a los demás festivales veraniegos, optando por una estética muy macabra.  

Esta diferencia tan marcada se podría atribuir a primera vista al temporal de cada zona, debido a que en los festivales que tienen lugar en la costa suele haber temperaturas más suaves y más altas, tal y como apunta Aldo Linares, Asesor de contenidos y comunicación del FIB. Según su punto de vista, las temperaturas altas, las playas y la costa en general suelen acompañar siempre estilos de música más enfocados al baile y a la fiesta, y en la mayoría de lugares con estas características ya suelen ser los estilos de música preferidos en los lugares de ocio como bares o discotecas. 

Además de esto, si observamos los festivales y la música que se suele escuchar en otras zonas del mundo, vemos que este patrón se mantiene, ya que el reggaeton procede de latinoamérica, donde es el estilo musical más escuchado, y en Estados Unidos encontramos el origen de un gran número de artistas de música electrónica en las zonas de Florida y California, que tienen una cultura similar de fiestas en la playa. 

En el lado opuesto, el rock, el punk y el metal suelen triunfar mucho más en países fríos, como son Gran Bretaña o Alemania, donde en la mayoría de festivales son de los géneros más buscados. Además de esto, la música punk y un gran número de artistas de pop y rock con grandes carreras proceden de Reino Unido y Alemania ha sido la cuna de grandes grupos de metal como Rammstein que han encabezado muchos carteles de festivales internacionales de rock. 

A parte de todo esto, también cabe destacar que todos estos festivales están localizados en “hotspots” turísticos o cerca de ellos, y por lo tanto brindan una experiencia también a los turistas que llegan de otras zonas de España o de fuera de la Península. Según Alex Rebecq, organizador de eventos del Resurrection Fest: “Muchos de los asistentes son turistas musicales, que vienen a la zona para visitar Galicia además de asistir al festival”. Según afirman también en su web, pretenden que el festival sea una experiencia de una semana y alaban la localidad en la que tiene lugar la fiesta, Viveiro, un pueblo que tiene “muy buena comida y unas playas muy bonitas”. 

Algo similar ocurre también en el resto de eventos, tal y como confirma Marc Domínguez, animador del Arenal Sound en 2018 y 2019, quien menciona que hay gran cantidad de personas de otras zonas, en especial de Madrid y del norte así como muchos “guiris” de zonas tan remotas como Rusia que vienen a disfrutar del buen tiempo y las bonitas playas de Burriana. 

Así, vemos que además de ser especialistas en su estilo de música y festival, también lo son a la hora de conectar el evento con la zona y con los lugares autóctonos destacados. Todo esto contribuye al crecimiento económico que traen consigo cada verano, haciendo que los comercios y empresas locales reciban un flujo de nuevos consumidores que vienen dispuestos a gastar. 

Con todo esto, si nos fijamos en las fechas de los festivales, veremos que la mayoría de ellos no coinciden, así, se permiten acceso a todo ese público de turistas musicales o personas a las que les puede interesar un festival de música. Así, como comenta el departamento de prensa de MAD Cool: “Creemos que sería posible que nuestro festival se realizara en otras zonas de la Península manteniendo un éxito similar, si no se solapa con otros festivales más conocidos en ese área”. 

Si bien es cierto que no parece ser parte de la estrategia de los festivales el no pisarle los pies a su competencia, es algo que resulta muy útil a la hora de contratar artistas muy buscados por varios eventos, ya que de esta forma el artista no tendría problemas de horario a la hora de acudir a varios de ellos. Estas apariciones dobles suelen ser pocas en el caso de los artistas o grupos que son cabeza de cartel, pero en el caso de grupos o artistas más locales como pueden ser Natos y Waor, Love of lesbian o la M.O.D.A. es algo que resulta muy útil. 

De esta forma, si bien muchos de los festivales mencionados tienen sus platos estrella y su propia personalidad que acompaña al público objetivo al que van dirigidos, ya sean emos, reggaetoneros, ravers, etc. Encontramos en estos puestos más bajos del cartel a muchos grupos que hacen una especie de gira por toda España y van de festival en festival, rellenando el cartel pero a su vez trayendo una gota de cohesión y familiaridad a cada evento. Esto es algo que llamaba la atención a Marc Domínguez, quien recalca que  en muchos de estos conciertos de grupos menos “importantes” es a veces donde hay el mayor espíritu de camaradería entre los asistentes. 

En conclusión, cada zona del territorio español tiene su marca de identidad en cuanto a festivales y música, que vienen marcados por la cultura de ocio y turismo que hay ya establecida en cada uno de ellos. Es así como cada lugar consigue su plato estrella, los grandes festivales que acaban por caracterizar esa zona y el turismo de quienes la visitan, ofreciendo una experiencia única que acompaña la experiencia turística y que acaban transformándose en la atracción principal de las vacaciones para muchos.