El Centre del Carme presenta “Art Contemporani de la Generalitat Valenciana IV”, una exposición institucional con firmas valencianas

 La exhibición alberga 37 obras de diversas temáticas y artistas

 

Andrea Navarro. València

   

Cartel de la exposición. Imagen propia

  

El Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) inauguró el pasado 5 de noviembre la exposición “Art Contemporani de la Generalitat Valenciana IV” que podrá visitarse gratuitamente hasta el 23 de enero de 2022. Esta exhibición que cuenta con un recorrido de cuatro años, adquiere y expone diversas obras de creadores valencianos anualmente. Sin embargo, esta cuarta edición es la más extensa hasta la fecha, ya que alberga 37 propuestas artísticas.

La Conselleria de Educació, Cultura i Esport inició esta campaña de adquisición de obras de arte en 2017. El objetivo de esta iniciativa es reunir un número significativo de piezas representativas de la actualidad artística en la Comunitat Valenciana, construyendo un patrimonio presente que se proyecta en el futuro y revitalizando el sector artístico contemporáneo. A su vez, es una buena herramienta para promover y dar a conocer el arte valenciano, consolidar a los artistas con un largo recorrido e impulsar a los nuevos talentos. Actualmente, ya reúne más de 110 obras.

“Art Contemporani de la Generalitat Valenciana IV” exhibe 37 obras adquiridas en 2020. Para garantizar la paridad, cuenta con la presencia equilibrada de artistas de Castellón, València y Alicante. Además, entre los autores de las obras también hay igualdad, ya que, 18 obras son de hombres, 18 obras de mujeres y una de un colectivo. En cuanto a las temáticas de los trabajos también son muy diversas, ya que, tratan temas como inmigración, contaminación, feminismo, tecnología, futuro, silencio, soledad…

 

Obras expuestas

El paraíso perdido - Pablo Auladell (Alicante)

 

El paraíso perdido. Imagen propia

 

 

Esta novela gráfica, ilustrada por Pablo Auladell y adaptación del poema de John Milton “El paraíso perdido”, fue ganadora del Premio Nacional del Cómic en 2016. El proceso de creación de la obra fue muy extenso, ya que pasó por varias editoriales hasta que finalmente pudo publicarse. Según explica Auladell, tardó un año en realizar cada capítulo, siendo la primera vez que se enfrentaba a un trabajo de tal magnitud.

Aunque en ningún momento se enfrentó al temido papel en blanco, hubo una mañana en que perdió el sentido de lo que estaba haciendo, “ese día fue un poco difícil, porque era una especie de depresión artística”, comenta Auladell. No obstante, el esfuerzo mereció la pena y Auladell quedó satisfecho con el resultado. “Hay un momento en cada proyecto donde te notas como rey, soberano, que dominas lo que estás haciendo”, explica Pablo. Ese momento fue el capítulo 3, su parte favorita.

Como en el resto de sus obras Auladell dibuja en carboncillo y utiliza pocos colores, ya que, considera que el color tiene que tener un sentido, debe ser narrativo. Además, su única referencia fueron unas máscaras arcaicas, es decir, modelos de escultura y arte arcaico que se adaptaban al tono poético de la obra y que había utilizado en obras anteriores.

Junto a “El paraíso perdido”, se encuentran otras obras de las comarcas de Alicante como: “El estanque de las nubes” del colectivo DimasIA, “Tres viajes” de Miguel Calatayud, “Noctiluca” de Juan Carlos Nadal, “Refugi” de Josep Pedrós i Ginestar, “El hilo de Ariadna” de Iluminada García Torres, “Debajo de ningún cielo” de Elena Aguilera y “Mirrors have memory” de Nuria Fuster, entre otras.

 

 Identidad perdida en suelo hidráulico. Trasunto de identidad - Alejandro Casanova (València)

 

Obra de Alejandro Casanova. Imagen propia

Las obras de Alejandro Casanova representan a individuos que reflejan la soledad de la cotidianidad. Desde la facultad trabaja temas similares, relacionados con el cuerpo humano, la figura y el retrato. “Mi interés es el estudio de la luz y el color a través de la carne”, explica Casanova. Aunque el artista no busca crear un fuera de campo, termina construyendo un contexto de elipsis para los sujetos representados que da a entender que hay algo más allá de la mirada del espectador. “Un periodista me decía que mis obras son como películas de David Lynch no por lo loco sino por lo que pasa fuera de campo”, cuenta Casanova. Él se limita a plasmar sus ideas y “es el espectador el que pone las historias a la obra”, reitera el pintor.

En cuanto a la tonalidad, el uso del blanco y negro en estas obras es una excepción, ya que, suele trabajar con colores. Además, no se ha inspirado en ninguna referencia para realizar su obra, sino que trabaja 6 horas diarias para poder obtener ingresos, se define como “un obrero de la pintura”.

Otros de los artistas valencianos que participan en esta exhibición son Carmen Calvo “Serie Naturalezas II0”; Silvia Lerín “A metal flower is a dead flower”; Carolina Ferrer “Escenografías de la memoria: la lógica de una obsesión” y Alex Marco “Down on the street”.

 

Observatorio - Laura Palau

 

 Observatorio. Imagen propia

Estas fotografías nos sitúan ante un punto de vista muy reducido, nos traslada a lugares escondidos y perdidos entre la vegetación. Desde su interior, podemos entender la cámara como un refugio desde el que observar el robo que sufren constantemente los apicultores de la zona. El objetivo de la obra es “reducir la mirada de las personas a la mirada de otros seres vivos, en este caso las abejas y empatizar con esta pequeña escala”, explica la fotógrafa.

Eligió fotografiar el interior de las colmenas porque su familia y ella tienen abejas y otros cultivos, por tanto, están muy arraigados al pueblo y a hacer sus cosechas. “Fue algo que no tuve que buscar, porque lo tengo en casa y me llama la atención que a veces roban las abejas y las colmenas y me parecía muy curioso que fuese un oro escondido”, cuenta Palau.