'No és fàcil ser valencià' y tampoco lo es mantener las costumbres valencianas

                                                                Fotografía de la exposición. Andrea Díaz.

 Andrea Díaz. Castelló

 

‘No es fácil ser valencià es una exposición permanente que se encuentra en el Museu Valencià d’Etnología (L’ETNO). Este lugar, está destinado a preservar la cultura tradicional y popular del pueblo valenciano. La exposición en concreto está centrada en tres ámbitos: la cultura popular del pueblo en la ciudad durante época preindustrial, la cultura en las huertas y marjales en este mismo periodo de tiempo y, por último, la vida de los valencianos en las zonas de montaña. 

 

Esta contraposición entre ambos lugares se palpa, nada más entrar en la exposición. Bajo una luz tenue, fondos oscuros y luces de neón, te sumerges en la primera parte que trata sobre la evolución de la ciudad de valencia y como esta afectó a la vida de los valencianos. El periodo comienza con la creación de la Estación del Norte, la implantación de cabinas de teléfono en lugares públicos, los edificios con varios pisos y, por último, los negocios que primaban durante esa época, así como su disposición en los locales. 

 

En la segunda parte de la exposición, la tónica cambia y pasamos a las zonas más rurales de la Comunitat Valenciana. A diferencia de la ciudad, las casas que habían eran barracas individuales donde vivían toda la familia y eran de dos pisos.  Las personas que vivían allí dedicaban a la plantación de arroz y la pesca en la Albufera. Los utensilios que utilizaban para desempeñar su trabajo estaban construidos de madera y eran bastante rudimentarios. Entre esas herramientas se encontraban corbellas, mulas mecánicas o molinos y junto a estas herramientas había fotografías en las que se podía ver para qué se utilizaban.

 

Tras la segunda parte de la exposición y subiendo unas escaleras que diferencian ambas partes, nos sumergimos en la última de las salas. Esta, más modesta que las anteriores y parecida a la segunda se describe con imágenes y vídeos cómo eran las casas de piedra que construían, las actividades que desempeñaban en el campo, como criaban a los animales, las herramientas agrícolas que utilizaban y los carros donde transportaban la cosecha. 

 

L’ETNO intenta diferenciar cómo era la vida de los valencianos en la época preindustrial dependiendo la zona en la que residían. Es por eso, que hace esta fragmentación visible por salas. Además, la disposición crea un ambiente de contraste entre la sala encargada de retratar la ciudad donde prima la tecnología y las salas de las huertas o zonas de montaña retratándolas como zonas menos desarrolladas. Esta exposición hace replantearte la vida antes de la globalización y los avances tecnológicos. Como nuestros abuelos tuvieron que adaptarse a estos cambios tecnológicos y sociales para que nosotros hayamos llegado hasta aquí.

                                                                 

Comentarios

Entradas populares